El 98 por ciento de la
superficie terrestre de China se encuentra entre los 20 grados
y 50 grados de latitud norte, por lo que extensos territorios
pertenecen a la zona templada. Se observan grandes diferencias
climatológicas entre diversas regiones debido al vasto
territorio y la compleja topografía del país.
Aunque prevalece el clima templado; también hay regiones
desérticas y semiáridas en el interior occidental
y una pequeña área de clima tropical en el extremo
sureste. Los climas de China, sin embargo, tienden a ser más
continentales y por tanto más extremos, y los contrastes
regionales suelen ser mayores, debido a la mayor masa continental
de Asia respecto de América del Norte. El monzón
(viento predominante) asiático ejerce el control primario
sobre el clima de China. Durante el invierno los vientos fríos
y secos soplan desde el sistema de altas presiones de Siberia
central provocando el descenso de las temperaturas en todas
las regiones al norte del río Yangzi Jiang y sequía
en la mayor parte del país. En el verano, un aire húmedo
y cálido fluye hacia el interior desde el océano
Pacífico, lo que da lugar a precipitaciones en forma
de tormentas ciclónicas. Enormes cantidades de lluvia
caen rápidamente en las laderas de las montañas
a sotavento. Las cuencas remotas del noroeste, en cambio,
reciben escasas precipitaciones. Las temperaturas de verano
son muy uniformes en la mayor parte del país, pero
los inviernos se caracterizan por diferencias extremas de
temperatura entre el norte y el sur. El sureste de China,
hacia el sur del valle del Yangzi Jiang, tiene un clima subtropical,
y un clima tropical en el extremo sur. En esta región
las temperaturas de verano alcanzan los 26 ºC de promedio;
en invierno las temperaturas descienden desde los 17,8 ºC
en el sur tropical hasta unos 3,9 ºC a lo largo del río
Yangzi Jiang. Un promedio de ocho tifones anuales, sobre todo
entre julio y noviembre, provocan vientos y lluvias fuertes
a las áreas costeras. Hacia el suroeste, las llanuras
montañosas y cuencas también presentan climas
subtropicales, con considerables variaciones locales. Como
resultado de las mayores alturas, los veranos son más
frescos mientras que los inviernos son templados como consecuencia
de la protección que ejercen, impidiendo la entrada
de los vientos del norte. La depresión del Sichuan,
es muy conocida por su alta humedad y nubosidad; las precipitaciones,
especialmente abundantes durante el verano, exceden los 990
mm anuales en casi todas las regiones del sur de China. La
región china del Norte, que no tiene cadenas montañosas
que formen una barrera protectora contra el flujo de aire
de Siberia, experimenta un invierno frío y seco. Las
temperaturas de enero varían desde los 3,9 ºC
en el extremo sur hasta unos -10 ºC al norte de Pekín
y en las mayores alturas del oeste. Las temperaturas de julio
suelen exceder los 26,1 ºC y en la llanura septentrional
del país se acercan a los 30 ºC. Las precipitaciones
anuales totales son de menos de 760 mm, la mayoría
durante el verano, y van disminuyendo hacia el noroeste que
tiene un clima más seco, de estepa. La variabilidad
interanual de las precipitaciones en estas regiones es grande;
este factor, ombinado con la posibilidad de tormentas de arena
o granizo, hacen que la agricultura sea precaria. Durante
más de cuarenta días al año hay niebla
en el este, y durante más de ochenta, a lo largo de
la costa. El clima de Manchuria es similar al del norte de
China, pero algo más frío. Las temperaturas
de enero sobre una gran parte de la llanura de Manchuria son
de -17,8 ºC de promedio, mientras que las de julio suelen
exceder los 22,2 ºC. Las precipitaciones se concentran
en el verano, y su promedio oscila entre unos 510 y 760 mm
en el este, disminuyendo hasta unos 300 mm al oeste del desierto
del Gran Xingan. En la frontera con Mongolia y en el Noroeste
predominan los climas de estepa y desérticos. Las temperaturas
de enero tienen un promedio por debajo de -10 ºC en todas
las zonas, excepto en la depresión de Tarim. Las temperaturas
de julio suelen sobrepasar los 20 ºC. Las precipitaciones
anuales totales son de menos de 250 mm, y la mayor parte del
área recibe menos de 100 mm. A causa de su altitud,
la meseta tibetana, en la región Suroeste, tiene un
clima frío de montaña; las temperaturas de julio
permanecen por debajo de 15 ºC. El aire es seco a lo
largo de todo el año con precipitaciones anuales totales
de menos de 100 mm en todos los lugares excepto en el extremo
sureste.
|